NUEVA YORK – El propietario de una tienda de dulces no pudo evitar un peculiar robo consumado por un adorable y peludo malhechor.
Una ardilla entró a la tienda de Disney como “Pedro por su casa”, trepó por la estantería y se tomó el tiempo para elegir los dulces que se llevaría con absoluto descaro.
El curioso ladronzuelo pescó una bolsita de maní y huyó de la tienda sin que el propietario pudiera hacer algo al respecto.
La hazaña enamoró a internet y a varios usuarios de redes sociales, que al igual que el dueño de la tienda, también se rindieron al encanto del adorable y peludo ladrón de maní.