México enfrenta una crisis de derechos humanos "de proporciones epidémicas", en la que las desapariciones, la tortura y los brutales asesinatos se están convirtiendo en los sellos distintivos del país, señaló hoy Amnistía Internacional (AI) a unos días del inicio de la visita del papa Francisco.
"Tan pronto como ponga un pie en la Ciudad de México, el papa Francisco se encontrará frente a frente con una de las más perturbadoras crisis de derechos humanos de todas las Américas", dijo Érika Guevara-Rosas, directora de AI para América, citada en un comunicado de la organización.
"De las decenas de miles de personas que han desaparecido al extendido uso de la tortura, los crecientes números de asesinatos de mujeres y la total falta de capacidad para investigar crímenes, los abusos contra los derechos humanos se han convertido en símbolos de México", dijo.
"Urgimos al papa Francisco a que use su poderosa influencia para persuadir al Gobierno de (el presidente Enrique) Peña Nieto de que tome con seriedad la terrible crisis de derechos humanos, asegurándose de que todos aquellos que cometen crímenes enfrenten la justicia", expuso Guevara-Rosas.
Sólo emprendiendo acciones concretas y decisivas para llevar a los criminales a la justicia "el Gobierno mexicano comenzará a encarar esta crisis hondamente arraigada", puntualizó.
