Con los honores a la bandera inicia el día de los reclusos del penal de Topo Chico, siguiendo las nuevas reglas impuestas en esta prisión, luego de que 49 reos murieran en una trifulca hace casi dos semanas.
Los internos se muestran complacidos de lo que ahí está ocurriendo, sobre todo de los operativos de revisión que se están realizando en éste y otros penales del estado, porque así, dicen, están terminando con los privilegios, los lujos y grupos de poder.
En las últimas dos semanas, las tres principales cárceles de Nuevo León han sido intervenidas por las fuerzas de seguridad. Primero le tocó a Topo Chico, luego Apodaca y este martes fue el turno de Cadereyta.
En los tres casos, los uniformados buscan armas y drogas, para evitar que se repitan escenas como las del 10 de febrero, cuando dos grupos antagónicos se enfrentaron a muerte.
En las imágenes captadas por las cámaras de seguridad se ve el momento en el que los reos se reúnen y comienza la discusión.
Luego las cosas empeoran, los presos toman colchonetas, sábanas y otros materiales inflamables con los que inician un incendio al interior de un edificio.
El caos reina. En una de las esquinas un par de hombres agreden a otro que está en el suelo, lo dejan desangrándose, pero aun así otro llega y lo sigue golpeando en la cabeza.
Noticias Destacadas
Los videos también muestran cómo se inició el infierno en uno de los pasillos. Las vallas de madera que había construido son alcanzadas por bombas molotov y quienes están dentro no alcanzan a escapar.
Luego viene la calma, los sobrevivientes reconstruyendo el cerezo, tratando de olvidar aquel trágico día.
El gobierno estatal se ha comprometido a mejorar sus condiciones y les envió una brigada de doctores, abogados y dentistas, pero sobre todo les ha dicho que luego de 70 años, pronto cerrarán las puertas de la prisión de Topo Chico.
