“La gente a tu alrededor dice -estás bella, llena de vida…¿Una relación?¿Un trabajo? Te encuentras otro…sal, arréglate- y lamentablemente no es así” dice Alina Albizu sobre los momentos que vivió en depresión. “Yo creía que no iba a salir, yo sentía que me iba a morir.
Y es que ella ha logrado superar una enfermedad que, según la Organización Mundial de Salud, golpea a 300 millones de personas en el mundo, una que es la más común entre los jóvenes y que aqueja en su mayoría a las mujeres: la depresión.
A sus 29 años, Albizu puede contar que gracias a un proceso integral de sanación que lleva desde hace tres años, inició su proceso de mejora emocional, “cuando estás depresiva, es como si viene algo sobrenatural y no tienes control sobre eso, es como esta no soy yo, sal de mí; así era como yo me sentía”.
Ella empezó a sentir problemas cuando terminó su relación de 10 años, cuando en su trabajo perfecto empezó a sufrir de acoso por parte de su jefe, y poco a poco, empezó a caer en la depresión, “tuve varias pérdidas. Tu vida tiene cuatro columnas: tu carrera, tu vida espiritual, tus relaciones, tu cuidado físico...si uno está mal, tú no estás equilibrado y todas colapsaron al mismo tiempo”.
Pero ese golpe, fue el que le permitió encontrarse más tarde con su vocación y ahora se desarrolla como chef y coach profesional, “me rehusaba a tomar antidepresivos. Dije -¿Qué hago?-, comencé a cocinar (eso me distraía), comencé a hacer recetas saludables, postres…cuando yo estaba en la cocina, no estaba pensando en lo que había perdido, estaba pensando en lo que podría crear”.
Es pore so que Albizu busca que esa experiencia haga eco en jóvenes y adultos, para que sepan reaccionar mejor a esas situaciones que a veces, impiden encontrar el lado bueno de las cosas, “hay una gran necesidad en la comunidad de que crean en ellos mismos”, dice.
Además, ha hecho la publicación de un libro sobre su experiencia y se encuentra desarrollando una serie de conferencias con expertas en comunicación, imagen y sexología.; ella funge como asesora nutricional. Buscan resonar en Estados Unidos, pero también en Panamá, su tierra natal, en donde esperan hacer sonar fuerte su voz.
