El fiscal general de Nevada, Aaron Ford, dijo el jueves que está preocupado por la posibilidad de intimidación de votantes después de que el presidente Donald Trump imploró a sus seguidores que "vigilen con mucho cuidado" las urnas; los fiscales estatales planean una aplicación estricta, dijo Ford en una entrevista.
Trump hizo los comentarios durante el primer debate presidencial de esta semana con el candidato demócrata y exvicepresidente Joe Biden.
Ford dijo que cree que Trump "no estaba hablando de ver las encuestas; estaba hablando de intimidación de votantes ". Además tuiteó el martes: "Créame cuando lo digo: si lo hacen y serán procesados".
Ford, un demócrata, dijo a The Associated Press que veía los comentarios de Trump como amenazantes porque Trump también se ha negado a denunciar a los supremacistas blancos o comprometerse con una transferencia pacífica del poder.
Llamó a los comentarios de Trump sobre observación de elecciones como un "silbido de perro" que podría atraer a los partidarios de Trump a los lugares de votación e ignorar las leyes de observación de elecciones de Nevada.
“No aprecio, francamente, una repetición de lo que vimos durante la era de los Derechos Civiles donde la gente fue intimidada para que no ejerciera su derecho constitucional al voto”, dijo Ford.
La ley de Nevada permite que las personas monitoreen los lugares de votación siempre que no hablen ni interactúen con los votantes. Ha sido un delito desde 1960 intimidar, amenazar o impedir que las personas ejerzan su derecho al voto.
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El comentario de Trump sobre la observación de encuestas se ha centrado en estados indecisos como Nevada y Pensilvania, y durante el debate Trump criticó a los funcionarios de Filadelfia por no permitir que los observadores electorales no certificados ingresen a las oficinas electorales satélite.
La ley de Pensilvania permite que los observadores electorales certificados observen la actividad en los distritos electorales, pero aún no se ha certificado ningún observador electoral para la campaña de Trump, el Partido Republicano u otras campañas republicanas, informó el Philadelphia Inquirer.
Trump ha alentado la observación de elecciones en Nevada desde un mitin del 12 de septiembre, donde acusó a los demócratas de intentar manipular las elecciones.
“Espero que todos sean observadores electorales. Espero que estén, porque con ustedes viendo las encuestas, será bastante difícil hacer trampa. Les diré; no me gustaría ser un tramposo ", dijo a sus seguidores en la ciudad rural de Minden, en el norte del estado.
La oficina de Ford dijo que no había procesado a nadie por intimidación a los votantes desde que asumió el cargo en 2019.
Los fiscales estatales dependen de la cooperación de los funcionarios electorales estatales para hacer cumplir las leyes electorales. A fines de julio, la secretaria de Estado Barbara Cegavske (republicana) dijo a los legisladores estatales que los funcionarios electorales carecen de capacidad de investigación y dependen principalmente de las personas en los lugares de votación para denunciar presuntos fraudes y otras violaciones.
La oficina de Ford dijo que la mayoría de los informes son infracciones al registro de votantes, incluidos registros de votantes desechados o robo de identidad.
El exfiscal general de Nevada Adam Laxalt, un republicano, dijo que no recordaba haber procesado la intimidación de votantes durante su mandato de 2014 a 2018. Laxalt, en un comunicado enviado por correo electrónico, calificó los comentarios de Ford de comparar la observación de las elecciones con la intimidación de los votantes como "extraños".
Dijo que no estaba claro por qué "Ford está intentando intimidar esta avenida legal y tradicional consagrada por el tiempo para ayudar a dar al público más confianza en nuestras elecciones en un momento en que la confianza electoral es tan baja".
