Un tribunal federal de apelaciones falló el martes a favor de dos iglesias de Nevada que dicen que las restricciones estatales de COVID-19 violan sus derechos de la Primera Enmienda porque imponen límites de asistencia más estrictos a las reuniones religiosas que los casinos y otros negocios seculares.
La Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de Estados Unidos revocó fallos anteriores de la corte federal que confirmaron el límite estricto de Nevada sobre el tamaño de los servicios de adoración. Instruyó a los jueces de distrito a prohibir preliminarmente a Nevada imponer límites de asistencia a las iglesias más estrictos que los de otras reuniones o negocios.
"Las restricciones en cuestión aquí, al prohibir efectivamente que muchos asistan a servicios religiosos, golpean el corazón mismo de la garantía de libertad religiosa de la Primera Enmienda", escribió un panel de apelación de tres miembros en una opinión de 11 páginas que revirtió el fallo del tribunal inferior que niega una orden judicial preliminar solicitada por Calvary Chapel Dayton Valley al este de Reno.
Los límites tratan "numerosas actividades y entidades seculares significativamente mejor que los servicios de culto religioso", dijo en una opinión de cuatro páginas que revirtió un fallo anterior similar que involucraba a Calvary Chapel Lone Mountain en Las Vegas.
La asistencia a casinos, restaurantes, bares y muchos otros negocios actualmente está limitada al 25% de la capacidad, pero las iglesias están sujetas a un límite estricto de 50 personas o al 25% de la capacidad, lo que sea menor.
Tras la decisión tomada por el 9° Circuito, el gobernador de Nevada, Steve Sisolak dijo “El propósito de esta directiva, y todas las directivas que el estado ha emitido desde el inicio de esta pandemia global, fue y es salvar vidas y proteger la salud del público”.
Agregó que está decepcionado con la decisión, pero que Nevada cumplirá con la orden, que buscaba evitar la propagación del coronavirus entre la población. “Sigo animando a los habitantes de Nevada a practicar sus creencias religiosas de una manera que sea segura para ellos y sus familias, especialmente con las próximas vacaciones”, dijo Sisolak.
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“En un esfuerzo por proteger a los más vulnerables entre nosotros y cuidar a nuestros vecinos durante este momento difícil, pido a todos los líderes religiosos y lugares de culto que implementen las medidas de salud pública que han demostrado mitigar la propagación”, agregó.
