Cinco integrantes de la pandilla MS-13 han sido arrestados por los homicidios de 10 víctimas en el área de Las Vegas durante el año pasado, indicaron el lunes las autoridades.
Joe Lombardo, jefe de la policía metropolitana de Las Vegas, no proporcionó el nombre de ninguno de los sospechosos, pero sí dio a conocer una lista de víctimas que fueron halladas muertas por puñal o herida de bala desde marzo de 2017.
También presentó un mapa de los lugares donde se encontraron los 10 cadáveres, incluidos terrenos federales en áreas alejadas cerca del Lago Mead y en montañas de los alrededores de la ciudad.
El anuncio fue efectuado en un contexto en el que el presidente Donald Trump y el secretario de Justicia Jeff Sessions han declarado estar comprometidos a aplicar medidas enérgicas contra esta violenta pandilla.
El grupo delictivo La Mara Salvatrucha surgió en la década de 1980 como una pandilla callejera en Los Ángeles, pero los fiscales federales creen que en la actualidad tiene miles de integrantes en todo Estados Unidos, principalmente inmigrantes de El Salvador y Honduras. Han sido vinculados con olas de violencia en los suburbios de la ciudad de Nueva York, Washington, D.C., y otras comunidades.
Trump dice que esta delincuencia se debe a la existencia de leyes de inmigración laxas que permiten que miembros de la MS-13 ya deportados regresen a Estados Unidos para aprovecharse de personas que sí cumplen con las leyes. También culpa a un sistema federal que ha permitido que permanezcan en el país decenas de miles de niños de América Central que cruzaron la frontera ilegalmente sin ningún acompañante.
Lombardo insistió que el hecho de que los cuatro adultos y un joven de 17 años estén en un centro federal de detención de inmigrantes afectó duramente a una célula de la MS-13 en Las Vegas que él considera cuenta con menos de 50 miembros en el área.
El teniente John León, director de la unidad antipandillas de la policía de Las Vegas, dijo que el vínculo de la MS-13 con los homicidios en los alrededores de la ciudad se hizo evidente en enero después de que los investigadores hallaron que dos hombres que se conocían entre sí y tenían vínculos o habían estado relacionados con la pandilla fueron encontrados asesinados de forma similar: a balazos, apuñalados y abandonados en áreas alejadas.
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Otro avance se logró después de que la policía efectuó allanamientos en los que incautó 18 armas, incluida una de fuego utilizada tanto en un homicidio en marzo de 2017 y en la muerte el 31 de diciembre de un hombre baleado frente al garaje de una vivienda.
Tres personas que fueron arrestadas junto con los demás fueron absueltas y no se les aplicaron cargos, dijo Lombardo, después de que proporcionaron lo que el jefe policial consideró era información vital para la pesquisa.
