MIAMI, FLORIDA - Ganas, esfuerzo y pasión en todo lo que hace, son tres palabras que describen la personalidad de Jesús Cassiano, un brasileño que actualmente se desempeña como repartidor de Uber Eats.
A la edad de 18 años, Jesús sufrió un accidente automovilístico en Brasil que lo dejó parapléjico. A raíz del suceso, su vida cambió por completo y el incidente le obligó a utilizar una silla de ruedas.
“No fue fácil, día por día, me fui buscando la independencia, fui haciendo todas las cosas, siempre hay posibilidades”, dice.
Una vez que llegó a Estados Unidos, sabía que tenía que trabajar para poder mantenerse pero también para sentirse útil a la sociedad. Por eso, hoy Jesús cuenta con la mayor puntuación que le otorgan a los trabajadores de Uber Eats por el excelente servicio que realiza a 26 kilómetros por hora en su silla de ruedas a la que le adaptó un motor eléctrico.
“Eso es lo bueno de Uber y Uber Eats, que personas como Jesús pueden en su propio horario hacer entregas de domicilio, escoger sus horas, escoger sus días”, nos dice Cassiano.
Jesús generalmente entrega dentro de un radio de 4 millas y se enfoca en las áreas de Brickell, Downtown y Little Havana. Su hora pico es el almuerzo.
Uber Eats requiere que los repartidores tengan un teléfono inteligente, una bicicleta o un medio de transporte motorizado para movilizarse esto fue precisamente lo que encendió el ingenio de Jesús quien decidió adaptarle un motor a su silla de ruedas a partir de ahí, su vida cambió y todo fue diferente.
