Tres niños de Nuevo México son ahora los héroes de su comunidad tras lograr espantar a unos ladrones en su intento por hacerse de un auto convertible.
Los pequeños estaban fuera de una iglesia cuando vieron a unos hombres romper el techo del auto. De inmediato se armaron con tubos y palos y fueron a confrontarlos.
El alboroto alertó a quienes estaban adentro y tras ser confrontados por los niños, los ladrones huyeron.
El auto pertenece a la ministra de la iglesia quien dijo que era la tercera vez en la que intentaban robarla.