Legisladores quieren prohibir la pena de muerte en Nevada

Aseguran que el buscar la pena de muerte solo son gastos que pueden usarse en otras cosas.

Dos legisladores demócratas del Nevada proponen el fin de la pena capital y señalan costosas apelaciones y aplazamientos ordenados por la corte de un caso de inyección letal que terminó el mes pasado cuando el preso se suicidó.

"Es una carga para los contribuyentes", dijo el senador estatal James Ohrenschall, quien patrocina el proyecto de ley con el asambleísta Ozzie Fumo. Los dos legisladores respaldaron por separado medidas similares que fracasaron en 2017.

"Las personas que cometen delitos de pasión o delitos calculados no ven una estructura estatal de sentencia", dijo Ohrenschall, "en pocas palabras, no creo que haya demostrado ser un factor disuasivo".

La ley agregaría a Nevada a la lista de 20 estados y al Distrito de Columbia que prohíbe la pena capital; “En efecto, no tenemos la pena de muerte en Nevada", dijo Fumo, "esto simplemente lo codifica". El estado no ha llevado a cabo una ejecución desde 2006, y los dos legisladores señalaron los desafíos judiciales que detuvieron dos veces las ejecuciones programadas de Scott Raymond Dozier.

"Hemos visto a las compañías farmacéuticas acudir a los tribunales para impedir que se usen sus productos y ganar", dijo Ohrenschall.

Fumo es un abogado defensor de Las Vegas que ha representado a los condenados a muerte. Estimó el costo promedio de las apelaciones obligatorias para los presos condenados a muerte en $500,000, y dijo que el estado ha gastado antes mil millones de personas de "almacenamiento" en cárceles y prisiones, durante y después de los juicios de pena de muerte.

"Si podemos reducir el costo, ese dinero puede ir a los salarios de los maestros", dijo. Los legisladores dijeron que esperan que el nuevo gobernador demócrata Steve Sisolak, quien dijo durante la campaña del año pasado que apoya la pena de muerte "en casos extremos", podría reconsiderarlo.

"Creo que el gobernador Sisolak se da cuenta de que tenemos problemas con la pena de muerte en Nevada con la economía, el costo y la falta de disuasión de la delincuencia", dijo Ohrenschall. La portavoz de Sisolak, Helen Kalla, dijo el martes por la noche que el gobernador está al tanto del proyecto y seguirá el debate en la Legislatura; Kalla no dijo si Sisolak firmaría la medida si pasaba.

Nevada tiene 77 presos en el corredor de la muerte en espera de apelaciones, según el Departamento de Correcciones del estado. No hay ejecuciones programadas actualmente.

Dozier, un asesino condenado dos veces, renunció a sus apelaciones en 2016 y se ofreció a morir, pero una serie de luchas judiciales pospusieron su ejecución. Fue encontrado muerto el mes pasado en la prisión estatal de Ely. Su muerte fue declarada como un suicidio.

Su muerte puso fin a varias demandas sin una decisión judicial sobre si el plan de Nevada de usar una combinación nunca probada de medicamentos, incluidas altas dosis del poderoso opioide fentanilo y un agente paralizante muscular, causaría una muerte inconstitucionalmente cruel e inhumana.

Tanto Ohrenschall como Fumo señalaron que los reclusos sentenciados a cadena perpetua sin libertad condicional no son elegibles para recibir sentencias reducidas. "En Nevada, eso significa que sales de la prisión en una caja de pino", dijo Fumo. "Para mis clientes, el peor castigo sería la vida sin la posibilidad de libertad condicional".

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