Unas hermanitas narran el brutal asalto armado que sufrieron varios migrantes cubanos, entre ellos niños, adolescentes, mujeres embarazadas y ancianos, en un refugio temporal en Ciudad Juárez.
“Entraron tres hombres armados, me sentí mal cuando dijeron todos al piso (…) entraron y le dieron muchas patadas por la boca, a varias personas les robaron, a nosotros no, pero si golpearon mucho a mi abuelo”.
Una mujer embarazada lo narra así: “yo estoy embarazada de cinco meses, pero corrí, no me acordé en ese momento del embarazo porque fue el miedo tan grande” …
Miedo. Esa es la palabra que se repite en los testimonios de estos migrantes que forman parte de los 17 mil que están esperando su turno para solicitar asilo político en estados unidos…la mayoría de ellos han sido retornados a Ciudad Juárez dentro del Protocolo de protección a migrantes, o MPP, acordado entre los presidentes de Estados Unidos y México.
“Nosotros no tenemos dinero suficiente para costearnos la estancia aquí meses y meses. Ella está embarazada, la niña no está yendo a la escuela…ese protocolo que nos pusieron a nosotros es para que viremos a nuestros países”, dice el esposo de la embarazada.
Pero a pesar del miedo, del peligro y del costo de la supervivencia, mantienen vivo el sueño con el cual abandonaron Cuba.
“El plan es que mi abuela nos lleve para Estados Unidos y estemos con mi mamé, porque la queremos mucho y queremos estar con ella”, dice la niña.
