Demanda

150 trabajadores alegan cuarentena forzada en hotel de Los Ángeles sin sueldo

Una demanda  presentada en una Corte Superior de San Francisco alega falso encarcelamiento, falta de pago de salarios, falta de pago de salarios mínimos y horas extras, negligencia y prácticas comerciales ilegales.

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LOS ÁNGELES - Unos 150 trabajadores temporeros contratados por una fábrica de salmón en Alaska se ven obligados a poner en cuarentena sin pago en un hotel en Los Ángeles después de que tres de ellos dieron positivo por el coronavirus, según una demanda.

Los trabajadores, la mayoría de ellos de México y el sur de California, fueron contratados el 2 de junio por North Pacific Seafoods para trabajar en Red Salmon Cannery en Naknek, Alaska, hasta agosto, según la demanda presentada el viernes en el Tribunal Superior de San Francisco, Los Ángeles. Tiempos reportados.

En cambio, han estado atrapados en el Hotel Crowne Plaza LAX desde el 10 de junio, dijo el abogado Jonathan Davis.

Leauri Moore, vicepresidenta de recursos humanos de North Pacific Seafoods, dijo al periódico en un correo electrónico que no había visto la demanda y que no podía hacer comentarios.

Moore dijo que las autoridades en Alaska han emitido órdenes que requieren una cuarentena controlada de 14 días y pruebas de coronavirus para que cualquiera pueda trabajar en una planta de procesamiento de mariscos en el estado.

Un portavoz de Intercontinental Hotels Group, propietario del Crowne Plaza LAX y también nombrado en la demanda, dijo al Times en un comunicado el domingo que la compañía no comenta sobre litigios pendientes, pero que prioriza la salud y seguridad de los huéspedes y empleados . .

"Queremos enfatizar que el hotel no impidió que ningún huésped saliera libremente de la propiedad y proporcionó alojamiento seguro y cómodo a los huéspedes, incluidas tres comidas al día", escribió Jacob Hawkins, el portavoz, en un correo electrónico.

Con sede en Seattle, Pacific Seafoods contrata cada verano a cientos de trabajadores de todo el mundo para trabajos temporales en su fábrica de conservas de Naknek, prometiendoles transporte de ida y vuelta desde y hacia su punto de contratación, así como alojamiento y comidas.

Los trabajadores fueron llevados al hotel en Los Ángeles para hacerse la prueba del coronavirus. Una vez allí, se les indicó que esperaran juntos en un pasillo lleno de gente y que completaran el papeleo con bolígrafos compartidos, poniéndolos en contacto cercano durante seis horas, alega la demanda.

Cuatro días después, cuando los resultados fueron positivos para tres de los trabajadores, a los 150 se les informó que su cuarentena se había extendido 11 días, hasta el 25 de junio y que no se les pagaría por el tiempo, alega la demanda.

El hotel desactivó sus tarjetas de acceso para que no pudieran ir y venir, y se les advirtió que si abandonaban sus habitaciones por cualquier motivo, serían despedidos de inmediato, según la denuncia.

Desde el inicio de la cuarentena inicial el 10 de junio, el hotel ha proporcionado a los trabajadores no más de dos comidas al día, según la demanda. Además de que se les prohíbe salir de las instalaciones para obtener alimentos o suministros adicionales, también se les ha prohibido solicitar el servicio de habitaciones o acceder a los servicios del hotel, dice la queja.

Davis describió la situación como "extraña e indignante".

“Ciertamente hay muchas, muchas historias horribles en la historia de los trabajadores laborales y migrantes y los trabajadores temporales en los Estados Unidos. Pero no he visto este tipo de casos antes ”, dijo.

La demanda alega  falso encarcelamiento, falta de pago de salarios, falta de pago de salarios mínimos y horas extras, negligencia y prácticas comerciales ilegales. Los abogados planean ir a la corte la próxima semana y buscar una orden de restricción temporal para que los trabajadores reciban su pago de inmediato, dijo Davis.

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