HOUSTON – Las autoridades penitenciarias de Texas, sorpresivamente, anunciaron que antes de que finalice el año habrá un nuevo reo ejecutado.
Se trata de Scott Panetti, sentenciado en 1992 por la muerte de sus dos suegros hispanos en el área de Kerrville, al oeste de San Antonio.
Las víctimas de Panetti fueron Joe Gaitán Alvarado de 55 años y Amanda Carrión Alvarado de 56.
El caso de Panetti ha estado cargado de controversia, pues desde que fue sentenciado a morir, se ha desatado una fuerte controversia con la defensa, que ha argumentado que éste está mentalmente discapacitado.
El anuncio de la ejecución de Panetti se dio unas horas después de la ejecución de Miguel “Fat Boy” Paredes, un pandillero del área de San Antonio y quien fue el décimo ejecutado en el estado durante 2014.
La ejecución de Panetti, de 56 años, quedó establecida para el próximo 3 de diciembre en la cárcel de Huntsville, al norte de Houston.
